Buenas a tod@s,

Tengo el placer de presentamos la “conversación” mantenida con Javier Luxor. Tuve la suerte de conocer a Javier en el Museo del traje, durante el evento La Organización del siglo XXI. Nuevos patrones para la gestión de RRHH organizado por La Asociación Centro de Dirección de Recursos Humanos. Os puedo adelantar que ha sido un placer poder intercambiar opiniones con él y conocer su genial forma de entender el mundo. Desborda pasión por los 4 costados.

Javier es ingeniero de formación y mentalista de corazón. Es una persona valiente, auténtica y cercana, que un día decidió perseguir su “talento” y trabajar día y noche para conseguir sus sueños. Esta forma de afrontar la vida le ha ofrecido la posibilidad de cumplir con su receta de “éxito”.

Javier ha trabajado para muchas de las principales empresas del país y actualmente dedica sus días a:

  • Espectáculos de mentalismo corporativo.
  • Presentaciones de eventos.
  • Speaker motivacional.
  • Infotainer en ferias comerciales.
  • Personalización de espectáculos para presentar productos/servicios.
  • Formación de persuasión, influencia y creatividad.

Un maestro del escenario, capaz de conectar con toda la sala, como lo demuestra en su nueva obra “¡Imposible!”.

Visitad su perfil de LinkedIn, su web y empezar a conocerlo un poco más de cerca, porque es una persona de la que tod@s podemos aprender muchísimo.

Con ustedes, Javier Luxor.

¿Quién es Javier Luxor?

Soy una persona tranquila, feliz y hago lo que me gusta. Da la casualidad que esta pregunta que me estás haciendo me la he hecho, y me la hago, a menudo. Cuando me preguntan, “Oye Javier, ¿pero para ti qué es el éxito?” yo les digo lo que te acabo de contar: “estar tranquilo con mis emociones y sentimientos, y hacer lo que me gusta en cada momento”. Otros también me preguntan: ¿Tú has tenido éxito?” Y yo les digo que sí, a lo que algunos me contestan que no soy famoso, ni soy millonario… pero claro, es que para mí el éxito no depende de ser millonario o famoso. El éxito no tiene que ser lo mismo para cada uno, por lo que cada persona ha de descubrir su propia receta.

Y la seguridad económica, ¿dónde se queda?

Yo no quiero que el dinero aparezca en mi fórmula de éxito, pero está claro que para poder “estar tranquilo, feliz y hacer lo que me gusta” necesito dinero, como cualquier persona de esta cafetería. Ahora, ¿qué dinero necesito yo? eso vuelve a ser función de cada persona. Lo que sí puedo decirte es que cuando yo tengo una base de dinero, no necesito más, siempre y cuando ese dinero me permita cumplir mi fórmula de éxito.

Qué curioso, va a ser que el éxito y la felicidad empieza dentro de nosotros… ¿tendrá que ver con conseguir llegar a estar bien con uno mismo?

Ese estar “tranquilo y ser feliz”, tiene mucho que ver con la gestión de las emociones, ser sincero con uno mismo y con pensar, sobre todo con pensar. Hoy en día nos paramos poco a pensar, de alguna forma nos da miedo y nos agobia el hecho de poder encontrarnos con nuestras creencias limitantes. Pero, ¿sabes qué? que todos tenemos miedos, el asunto es que pocos lo reconocen. Pongamos el ejemplo de montar una empresa: Nos enseñan los fundamentos económicos, conceptos de marketing y posicionamiento… pero nadie nos ha enseñado a afrontar las emociones que surgen durante el proceso, que es lo que al final puede llegar a hundirnos.

Y es cierto que hay situaciones que nos desequilibran, que nos alejan de nuestra definición de éxito, pero he ahí la importancia de tener tus pilares claros para que te ayuden a saber dónde has de volver y si te estás engañando a ti mismo. Y por supuesto, he de decirte que yo no estoy “tranquilo, feliz y haciendo lo que me gusta” todo el año.

Javier, ¿y cuáles son tus motores de vida?

Mi hija y mi mujer… y mi pasión. A mí el mentalismo me encanta. Y respecto a esto hay mucha gente que te dice que cuando te dedicas a tu hobbie deja de ser un hobbie, pero yo creo que eso es mentira, al menos en mi caso. Yo he tenido la suerte de encontrar ese talento, y por eso digo que cuando encuentras tu talento y lo sigues, es difícil que deje de gustarte. Para que te hagas una idea de cuánto me gusta, a mis clientes les digo que subir al escenario lo hago gratis, ahí me subo porque me encanta y que les cobro por prepararlo, por las reuniones y todo el trabajo que hay detrás como formarme en EEUU, en cursos especializados en países como Reino Unido…

Hablemos de tu trayectoria: Ingeniero, departamentos de Ventas y Marketing, MBA… y en 1996, fecha de finalización de Ingeniería, comienza tu carrera de Mentalista Corporativo e Infotainer (Information + Entertainer)… y mi pregunta es: ¿Cómo surge todo? ¿De dónde viene esta pasión y cómo ha llegado a convertirse en la persona que es hoy en día?

Hay un momento en el que el mentalismo coge carrerilla, y es cuando empiezo a entender que puedo ganarme la vida con ello haciendo lo que me gusta. En ese punto, me hice un plan para conseguir ganarme la vida de ello y me puse a trabajarlo por la noche, en mi tiempo libre… El plan constaba de diferentes tareas y pasos como crear una marca personal, la definición del personaje, la creación de espectáculos desde cero… a la vez que me fijaba en personas que habían conseguido lo que yo quería. Y por último, equivocarme mil veces, meter la pata… un proceso de ensayo y error. Imagínate, al principio no sabes ni cuánto dinero pedir por tu trabajo… Vas poco a poco, paso a paso y un día te das cuenta que has conseguido un modelo de negocio que funciona, y es cuando te dices, “me voy a dedicar a ello”.

En ese punto empieza la fase más complicada: te levantas el martes solo, te quedas en casa solo enfrente de tu portátil… es una sensación complicada que nadie me contó y muy diferente al sistema que yo estaba acostumbrado a seguir. Ahí aprendí que estaba midiendo mi trabajo por el tiempo que dedicaba y no por las cosas que hacía. Entendí que la productividad era algo diferente, que podía permitirme no tener un horario fijo semanal, que podía ir al gimnasio por la mañana un martes y que no estaba mal trabajar un sábado. Ahora entiendo que mi trabajo es lo que hago, no el tiempo ni los horarios, y esto es otro punto que nadie me había contado.

Otro detalle que suelo aconsejar a la gente que me pregunta sobre esto es leer libros de la gente que te gusta, ir a verlos, conocerlos, coger ideas… cuando lees un libro, de alguna forma, estás conversando con ellos.

Quería darte mi más sincera enhorabuena por la cantidad de Premios que atesoras, los elogios que pueden leerse por la red hacia ti y la excelente cartera de clientes que tienes… Al realizar tus trabajos, ¿cuál es el secreto para conectar con la gente?

Mi secreto es la sinceridad. Estar en el escenario siendo tú mismo es la única forma de conectar de verdad. Si piensas que te están juzgando, si intentas ser algo diferente a ti, es posible que la actuación no salga bien. Yo salgo al escenario siendo yo mismo, con lo que soy, ni más ni menos, hablando desde el corazón.

Un buen ejemplo que define mi forma de relacionarme, de conectar, es la siguiente: Antes de conocerte me habría podido hacer una de estas dos preguntas: “¿Qué puedo sacar yo de este tío?” o “¿En qué puedo ayudar yo a esta persona?”… esa forma de estar en el mundo, sumado a la sinceridad, son herramientas imprescindibles. Es igual que si vas a un Networking con el objetivo de dar cuantas más tarjetas mejor… eso no funciona, las tarjetas son como los antiguos cromos, el cambiar una tarjeta con alguien no tiene ningún sentido. La gente que tengo como contactos hoy en día son gente a la que he dicho: “¿En qué te puedo ayudar?”. Las relaciones duraderas y de verdad son las que surgen así, son favores desinteresados, pero increíblemente, la vida te lo acaba devolviendo de muchas otras formas.

Es increíble, me veo reflejado mucho en esas palabras. Yo también he tenido la suerte de ayudar y de ser ayudado, y es increíble cómo funciona, surgen situaciones similares a la película de “Cadena de favores”.

De hecho yo hablo de la bolsa de favores, esa bolsa que va contigo y que vas rellenando con acciones desinteresadas. Yo he conseguido a través de cadenas de 6 personas, sin dinero de intermedio, un evento como resultado. Y la clave es la confianza, esto es lo que marca la diferencia, nace desde la fórmula de la reciprocidad y eso no tiene fin. Hasta el punto de recomendar a la competencia para eventos a los que a mí no me era posible acudir.

También he leído que para Javier Luxor “el premio más importante que uno puede recibir es el reconocimiento del público al final de una intervención”

Un premio está bien, te da nombre, te lo entrega un jurado cualificado, te mejora el currículo… pero lo mejor es la recomendación del público, yo trabajo con el boca a boca o el boca-oreja, como quieras llamarlo. Alguna vez me verás en medios como la prensa o la tele, pero no soy famoso ni quiero serlo. Quiero que mis clientes sepan que contratan algo que les va a encajar, que en la empresa me conozcan, que me recomiende la gente que confía en mí… en lo que yo hago la confianza es esencial. Por eso, la única forma de conseguirlo, es siendo tú mismo: si no les gusta lo que ven, has de dedicarte a otra cosa, no puedes aparentar otra cosa que no eres encima del escenario, ya que si no se lo creen, es difícil llegar a conectar.

Conocer cómo funciona la mente humana es una de mis asignaturas pendientes: nos preocupamos de estudiar cómo funciona un coche, una turbina eólica, un avión o un barco, y se nos olvida lo más importante, conocernos a nosotros mismos, entender cómo funcionamos y qué nos pasa por dentro. De ahí tal vez venga la importancia y la carencia actual de la gestión emocional… Javier, ¿Cómo funciona la mente? ¿Y qué poder tiene sobre nosotros?

Nadie nos enseña cómo enfrentarnos y entender esto. Lo principal es saber que por tu cabeza pasan varias cosas: hay pensamientos que tu mente genera para crearte modelos con los que desenvolverte en la vida, en función de lo has vivido. Luego hay unas emociones que son las respuestas a esos sentimientos, y por último, estás tú como observador. Has de entender que tú no eres tus pensamientos: has de dar un paso atrás y observar tus pensamientos, tus emociones… y saber que los puedes cambiar. El asunto es que una serie de pensamientos pueden valer para un tipo de vida, pero si quieres cambiar de vida, has de cambiar esos pensamientos por otros. Entonces, es cuando hemos de diferenciar la tipología o naturaleza de los pensamientos: Si es un pensamiento bueno: Perfecto; el problema es cuando has creado un pensamiento que te lleva a una creencia limitante, y es entonces, cuando ese pensamiento te machaca. Muchas veces hacemos caso a ciertos pensamientos para evitar que nuestras emociones se revuelvan y el cuerpo comience a sentir miedo.

Al final es un diálogo contigo mismo, con tus propios pensamientos, pero sin olvidar que NO somos nuestros pensamientos, ni tampoco nuestros miedos. Enlazándolo con la frase “el tiempo no lo cura todo”, podemos decir que el tiempo te da la oportunidad de cambiar hábitos, de cambiar la idea de lo bueno o lo malo, saber qué es lo que tú quieres de verdad… la clave es que hemos de adquirir la capacidad de cambiar nuestros modelos y creencias.

Una buena pregunta para empezar sería: “¿Tu qué quieres?, ¿estar bien contigo mismo o estar bien con el grupo? ¿A qué estás dispuesto a renunciar para formar parte de una manada?”

¡Qué gran verdad! Javier, cuéntanos más sobre ASK-me Academy, tiene una pinta buenísima.

La idea de este proyecto es mostrar los secretos de los maestros, pero está aún pendiente, no he parado de hacer otros proyectos desde que lo lancé. Con este programa quiero sacar la lectura de mucha gente que ha triunfado y ofrecérsela a la gente. Eso que no te enseñan en el MBA: la actitud, ir más allá de lo que recogen los libros, no limitarte a la parte teórica … En cuanto acabe varios proyectos, me meteré a fondo porque es un proyecto muy ilusionante, pero a la vez bastante ambicioso, por lo que quiero dedicarle todo mi tiempo y esfuerzo. De hecho, en breve, me voy a Londres a formarme sobre algunos de los temas que quiero abordar.

Hay algo que soy consciente de que te han preguntado en más ocasiones, pero que me gustaría compartirlo aquí también contigo. Cómo podemos escuchar en Spiderman, “un gran poder conlleva una gran responsabilidad”… Y si eres capaz de entender/saber lo que otro piensa, de meterte dentro de su cabeza… ¿dónde poner la barrera? ¿Dónde se encuentran los límites?

Te respondo rápido: imagínate que estas aquí conmigo y sabes que puedes quitarme la cartera, y que a la vez, estás 100% seguro de que no te voy a pillar… ¿Lo harías? ¿Podrías hacerlo? Pues es lo mismo con esto. Yo nunca haría a una persona tomar una decisión en contra de su voluntad fuera del escenario, ni encima del escenario tampoco. En todos lados existe gente con valores y ética, pero también gente sin ellos, lamentablemente…

Y respecto a la gestión emocional, y relacionándolo con RRHH, ¿Hacia dónde se dirige la gestión de RRHH?

Los procesos de RRHH deberían poder detectar intangibles como la empatía, la cercanía… si no son capaces de identificarlo, deberían mejorar o cambiar los procesos. Pero esto está cambiando en algunas empresas de RRHH, están empezando a enfocar a la persona como persona, y a buscar esas habilidades que no tienen que ver con lo racional, sino más con esas habilidades emocionales. En algunos casos se habían quedado un poco rezagados y con un “rol” que mucha gente les asigna erróneamente: recursos humanos es el departamento fundamental de la empresa, no son los que pagan las nóminas. ¿Cómo crear un puesto y encontrar al mejor para él? ¿Cómo formar a su gente? ¿Cómo tenerles desarrolladas y felices? Esas son algunos de los retos, y la clave es dejar de ser un número. No se ha hecho antes tal vez porque es muy difícil y además necesita el apoyo y la implicación de toda la organización. Todo el mundo ha de creer que la gestión emocional es cosa de todos, empezando por nosotros, porque muchas veces somos como individuos los que no queremos cambiar ni salir de esa zona. Es muy complicado, yo no sabría cómo resolverlo, pero debemos hacerlo.

Ilusionismo, mentalismo, magia… ¿Qué sueños te quedan por cumplir?

¿Sueños?… ahora estoy tan a gusto que me gustaría seguir así, no quiero más, me considero una persona de éxito bajo mi definición de éxito. Y me puedes preguntar, ¿y dentro de 10 años? Pues no lo sé, pero me gustaría estar tranquilo, ser feliz y haciendo lo que me gusta, aunque tal vez ya no me gane la vida como lo hago ahora.

Y tocando el tema del certamen del 48º Congreso AEDIPE, ¿Cómo crees que ha de ser el líder del futuro?

Es curiosa la palabra “líder”: A ti nadie te llama líder, ni en tu tarjeta pone líder… no te puedes autodenominar líder, es la gente la que te considera un líder, y en muchas ocasiones, sin siquiera utilizar la palabra líder. Creo que un líder ha de tener un liderazgo interior muy fuerte, ¿cómo liderar un grupo de gente sin poder auto-liderarte a ti mismo?, has de ser capaz de gestionar las emociones, el pensamiento y predicar con el ejemplo. Quiero pensar que si alguien está viendo mis acciones le puedan servir para algo positivo, lo veo desde ese punto de responsabilidad hacia los demás. Es como una frase que he leído en varias ocasiones: Un jefe dice “ve”, y un líder dice “vamos”.

Tu respuesta a las 2 últimas preguntas nos ayudarán a preparar futuras entrevistas y entender qué te gustaría leer y encontrarte en ellas. Si tuvieras que elegir una persona, ¿de quién te gustaría leer una entrevista?

Me gustaría que entrevistaras a Victor Küppers, vive en Barcelona. ¡Es un fenómeno! habla de entusiasmo y actitud, te contagia, te pone las pilas… enseña a sus alumnos cosas geniales.

Y la última pregunta, ¿qué pregunta le gustaría dejar al siguiente entrevistado?

¿Qué libro estás leyendo ahora mismo? ¿Qué libro crees que no debería dejar de leer?

 

Un abrazo,

Javier Luxor y Rodrigo Sampedro Gutiérrez